viernes, 13 de noviembre de 2009

05 de Octubre de 2009, Cien Años del Nacimiento de Don Jesús Isaac Valdez Díaz: Una Historia para Guardar



Un abrazo muy fuerte y cariñoso para todos ustedes y como bien saben, mañana lunes se cumplen 100 años del nacimiento de mi papá que fue en el pueblo de Huancarqui, posiblemente a las 6 de la mañana y a lo mejor con la ayuda de una partera muy famosa que había en el Valle de Majes llamada doña Nicolasa Téllez y nacida en Cotahuasi pero afincada en el pago de Bilbao.
No es la intención de tocar ni mucho menos escribir una biografía de personaje tan querido y complejo pero en homenaje a él, contarles una historia corta y amena de algo que ocurrió cuando yo tenía 8 meses de nacido, mi mamá estaba embarazada, y que, al nacimiento, sería mi hermana Rosa Victoria.
Como parte de este homenaje les haré llegar unas fotografías del cumpleaños N° 98 de mi tía Graciela que fue el 25 de agosto y que tuve la suerte de acompañarla
Frente a la inminente operación de Gibito de una dolencia digestiva en el mes de noviembre, estoy completamente seguro que todos estamos y estaremos constantemente con nuestros pensamientos con él y su familia y de parte mía lo estaré acompañando allá en Buenos Aires cuando esto ocurra.

La historia que les quiero contar, ocurre a mediados de febrero del año de 1945, que era un día domingo, y la noche anterior mi papá había venido a Los Puros desde la Barranca en su caballo, a la casa de mis abuelitos donde estábamos mi mamá y yo recibiendo los engreímientos y caricias del caso por estar en el seno de una familia tan numerosa y llena de afecto y generosidad, además de ser el primer nieto (y único hasta ahora) que nació en tan hermosa y solariega casa.
Después de almorzar, mis tías y con la ayuda de mi mamá, pidieron permiso a mi abuelito Raúl para irse a bañar a lo que él no accedió por estar el "río en todo entrar"; pero a tanta insistencia les dijo que sólo podrían ir con mi papá con quién y ambos, se profesaban un inmenso respeto y afectuosa deferencia. Y así fue, y luego de llevar la mejor fruta disponible, entre ella una canasta da mangos maduros, atravesaron los potreros de chito, matara, tembladera y chilcas, para llegar a las plantaciones de caña de azúcar y algodón de "El Buquerón" y San Antonio y recoger las ricas uvas moscatel, italia y abridores blancos y de color. Era un paseo muy bonito y ciertamente placentero.

Tanto mi tía Sarita, 5 ó 6 meses atrás, como mi tía Fidela hoy en la mañana, coinciden que efectivamente el río estaba muy grande, y que al estar en la orilla lavando la fruta y ya con sus ropas de baño que no eran sino unas batas que les llegaba hasta los tobillos, fueron arrastradas por el río mis tías Sara y Fidela de 16 y 15 años e inmediatamente mi papá se lanzó y consiguió sacar a mi tía Fidela pero mi tía Sarita fue llevada por el torrente hacia el tumbo principal aunque mi papá logró alcanzarla pero luego fueron ambos perdidos de vista pensando todos que ellos se habían ahogado. Mi mamá desesperada observaba todo y al ser avisado mi abuelito, él dispuso que se buscaran los mejores nadadores del momento y el encargado fue posiblemente mi tío Edilberto y así llegaron a Los Puros, don Luis Pássara, don Juan Manuel Sánchez, mi tío Buenaventura Rendón Núñez, y los jóvenes Ezequiel, Angel y Juan Rodríguez y Paulino Carpio con Esteban Arias... y fueron a buscar a los ahogados.
Horas después, estando casi una multitud en la orilla del río, en el fundo Las Palmas, fueron divisados mi papá y mi tía Sarita, desnudos pero saltando e igual los abrazos y lágrimas y las gracias a Dios no faltaron entre la multitud que acompañaba a la familia y a mi mamá que con razonable pesimismo se declaró o estaba a punto de declararse viuda. Mi tía Sarita, por estos excelentes nadadores y mejores personas, fue pasada en balsa improvisada de troncos y les pudieron pasar ropa, pero mi papá regresó y atravesó el río nadando junto con los demás.

Pasado el susto y despúes de unas buenas copas del mejor pisco en la casa, mis tías no quisieron perderse la función de circo del incomparable "Frejolito" y otra vez mi papá, mi mamá y todas las tías y los aspirantes de enamorados de ellas, se presentaron en El Monte, en el trapiche de tío Buenaventura Rendón y no se pudo negar que hubo un sentimiento de miedo por que "ahí estaban las ahogadas con el ahogado", apodo que duró algunos meses más. Quien no se esperaba ver a la familia en el circo fue el joven Federico Herrera Vigil con la que ahora podría llamarse su enamorada, una linda jovencita que vivía hace poco en Sacay y que había venido hacía poco de Huancarqui y se llamaba Olinda Corrales Pacheco.

Este año también se han cumplido 40 años de la muerte de mi tio Agenorcito y seguramente que todos hemos recordado a un hombre tan bueno y sencillo; su cuartito aún está de pie, triste, pero está. Lo verán en una de las fotos.

Un abrazo,



Jesús Baldomero Valdez Herrera.










Recuerdos


Queridos todos:
 
No es sencillo evocar a una persona que como mi papá o vuestro abuelo, fue una persona compleja y que en su trayectoria de vida hizo muchas cosas que merecen destacarse. Pero Jorge ha evocado de manera muy precisa y justa algunos de los rasgos centrales de su personalidad y modo de ser, Rosa lo ha ubicado en nuestro Panteón particular y Jesús ha descrito algunas de las cosas que hizo. Esta fue instantántanea, de esas que requieren la casi coincidencia entre pensamiento y acto, porque vacilar un instante implica la tragedia. Era el río Majes y de crecida y dos adolescentes arrastradas por la corriente. Fue un acto en que demostró su coraje, arrojo, fuerza física, destreza y confianza en si mismo. Mi papá arriesgó y ganó. Su suegro le había encargado cuidar de sus hijas y él estaba dispuesto a no volver si no era con ellas. Más sentido de la responsabilidad no se podía pedir.
 
Yo quiero destacar otro hecho que ustedes ya han leído en la semblaza de homenaje a mi tío Agenor, otro de nuestros santos familiares. El viaje de Majes a Monobamba. Fue un viaje tremendo, casi increíble e inaudito, sobretodo pensando en sus recursos y en los que la época podía proveer a un viajero. El relato de Jesús muestra a mi papá pensando y haciendo en un solo instante. Este viaje yo creo que lo muestra en otra faceta. Pensando y planificando, madurando una decisión. También olvidando su orgullo para pedir trabajo a una dictadura. Pero necesitaba trabajar para su familia y para él. También quería reconquistar su automía. Le ofrecieron Monobamba y aceptó. Fue un exilio interno. Quienes han visto "Cristo se detuvo en Eboli" de Francesco Rosi  podrán entenderlo mejor. Como lo he dicho fue un viaje tremendo. Cruzamos gran parte de la costa peruana y casi toda la Cordillera Central. Viajamos en camión, ómnibus, tren, camión otra vez en una ruta que era casi una senda y luego a mula o como yo, que fui llevado por mi papá en sus espaldas, mientras él caminaba la huella andina a pie. No había dinero para pagar otra bestia, pero sí la fuerza de un hombre en la plenitud de su vida. Partimos de los 600 ms. majeños a los seguro más de 4500 de la Cordillera hasta los 2 mil y tantos de Monobamba. Costa, Sierra y Selva. Majes, valle interandino de clima templado, costa  desértica y mar llenos de nieblas y humedad como lo conocemos hoy, Lima metrópoli asombrosa, tren fascinante, cordillera fría e inclemente, selva cálida y pletórica. Ese viaje también muestra a nuestro padre valiente, decidido, lleno de coraje y confianza en sí, amante del trabajo, pionero y poseedor de un gran espíritu de aventura y sentido de descubrimiento. De paso, los destinos familiares muestran que ese viaje que él emprendió cambió para siempre la dinámica de nuestra familia.
 
Lo notable de todo esto, es que aún en estos lugares, como luego fueron Tambo y Limatambo, mi papá no dejó de leer poesía y coleccionarla, buscar diarios, revistas, juguetes, libros y traerlos a casa y leerlos con nosotros como hacía con El Comercio, Billiken o El Gráfico en Limatambo, como más adelante comprando Life o novelas de Dumas o Sienkiewics entre otras. Todo eso en una época en que al pueblo podía llegar un solo diario o había que destinar dinero que no abundaba a cosas de lectura. Eso también lo hemos heredado.
 
Por todo esto lo recordamos y nos alegramos por él este 5 de octubre de 2009.
 
Besos y abrazos para todos,
 
Gilberto

martes, 1 de septiembre de 2009

El Eclipse Solar más Largo del Siglo XXI Dejará en la Oscuridad a China e India



Según especialistas, el próximo suceso similar ocurrirá recién en el año 2132

El eclipse solar total más largo del siglo XXI sumirá el miércoles en la oscuridad a China e India, los dos países más poblados del planeta, donde los cuentos y la mitología evocan con este fenómeno el anuncio de buenos augurios, pero también de malos presagios.
A partir de las 00:53 GMT (7:53 p.m. de hoy martes en el Perú) la noche volverá a caer poco después del amanecer en el estado de Gujarat (al oeste del país). Luego, la oscuridad irá invadiendo un corredor de 15.000 km de longitud por 200 km de ancho que atravesará India, Nepal, Bután, Bangladesh, Birmania y China, y alcanzará también las islas meridionales japonesas de Ryukyu.
“Será el eclipse más largo del siglo. Ninguno de nosotros vivirá lo suficiente para ver otro igual”, dice, entusiasta, Federico Borgmeyer, director de la agencia de viajes alemana Eclipse City, que viajó a Shangái para la ocasión.
El Sol quedará completamente tapado por la Luna durante seis minutos y 39 segundos en una zona poco habitada del Pacífico, un récord de duración para un eclipse que recién será batido en el 2132. La oscuridad, sin embargo, durará menos en India (entre tres y cuatro minutos) y en Shangái (alrededor de cinco minutos).
Se calcula que este espectáculo podrá ser observado por nada menos que 2.000 millones de personas, todo un récord en la historia de la humanidad.


Fuente: El Comercio, 21 de julio de 2009

El Enigmático Robert McNamara


Hombre calculador y resuelto. Formado en la escuela de negocios de la Universidad de Harvard, justo cuando se inventaba la teoría de la gestión científica basada en el planeamiento y las estadísticas, con fama de ejecutivo eficaz luego de reestructurar la Ford Motor Company, Robert McNamara fue convocado por el presidente Kennedy para dirigir el Ministerio de Defensa, y resultó un eximio guerrero de la Guerra Fría. Fiel a su lógica gerencial, pero con cuestionable sentido común y para muchos falta de ética, justificó el prolongado bombardeo de Vietnam; citó estadísticas diarias de muertos e indicó que morían más comunistas que no comunistas. Se lo consideraba cortés, pero soberbio y frío. Sin embargo, el presidente Lyndon Johnson una vez dijo: “Nunca lo adivinarías, pero el ministro más compasivo que tengo es Bob McNamara”. Cuando salió del Gabinete, desilusionado, pasó a liderar una segunda guerra, esta vez contra el subdesarrollo, como presidente del Banco Mundial. Solo que para él se trataba de la misma guerra. Aun siendo ministro dijo que “había una relación irrefutable entre la violencia y el atraso económico”, concepto que hoy es una verdad de Perogrullo, pero que en ese momento fue una ruptura conceptual. Apenas llegado al BM pronunció un discurso de vanguardia. Afirmó que el crecimiento económico no garantizaba el alivio de la pobreza. “Las estadísticas económicas son alentadoras, pero maquillan un cuadro mucho menos simpático el campesino sigue atrapado en su pobreza inmemorial, viviendo al margen de la subsistencia”. Así, frontalmente, retó una creencia central de la ortodoxia económica del momento: el credo de que el crecimiento productivo de un país beneficiaría a todos sus ciudadanos. Antes de McNamara, las memorias anuales del BM hablaban del desarrollo, pero no aludían abiertamente a la pobreza; en las fotos lo que más se veía era el cemento de las obras financiadas por el banco. Hoy, en cambio, las memorias muestran niñas indígenas y campesinas, poniendo la pobreza en los ojos del lector.
El enigma de McNamara se ha revivido con su muerte reciente. ¿Santo o diablo? ¿Defensor del capitalismo o baluarte de gobiernos intervencionistas? ¿Redujo la pobreza con sus sermones y obras, o la aumentó promoviendo el endeudamiento y apoyando a malos gobiernos? Lo entrevisté tres veces cuando me tocó escribir una historia del BM. Tenía respuestas preparadas para todo. El enigma y la complejidad nos incomodan. Por simplones y perezosos queremos juzgar y archivar, pero McNamara nos recuerda que la dualidad existe.
Richard Webb, en El Comercio, 13 de julio de 2009

Oculto entre las Sombras del Rey del Pop



Los interminables homenajes al desaparecido Michael Jackson (50) evidenciaron, una vez más, el poder mediático, político y económico que ostentan algunos medios de comunicación estadounidenses. Y es que la inesperada partida del Rey del Pop fue utilizada para restar importancia informativa al deceso del ex secretario de Defensa Robert McNamara (93), uno de los principales estrategas en la guerra de Vietnam.
Mientras las principales cadenas televisivas como CBS News, ABC News, CNNy Fox News, al igual que algunos medios impresos como el “USA Today” y “Los Angeles Times”, durante quince días consecutivos se dedicaron a difundir reportajes especiales sobre el legado musical de Jackson, al jefe del Pentágono durante las presidencias de John F. Kennedy y Lyndon B. Johnson le otorgaron uno.
El estilo de vida estrambótico de Michael Jackson, a pesar de sus acusaciones de abuso sexual contra niños y su adicción a los analgésicos, fue convertido en un tema de interés nacional y mundial. La muerte de 58.000 soldados estadounidenses, más de tres millones de vietnamitas y aproximadamente 1,5 millones de nativos de Laos y Camboya, simplemente fue minimizada o ignorada.
Según Nielsen Media Research el homenaje póstumo rendido el martes a Jackson, en el Staples Center de Los Ángeles, fue seguido por televisión en directo por 30,9 millones de estadounidenses, una cifra imposible de comparar con el interés mostrado por McNamara.




EX SECRETARIO DE DEFENSA
Lo patético del asunto radica en que no se puso énfasis en recordar que McNamara ejerció su cargo durante el tiempo que fue asesinado John Fitzgerald Kennedy, el tercer presidente de Estados Unidos víctima de un atentado mortal y un ícono de su época.
Ni siquiera se hizo referencia a que McNamara, luego de su paso por el Pentágono, pasó el resto de su vida tratando de explicar el papel de Estados Unidos en Vietnam y pidiendo disculpas por sus errores, lo que lo convirtió en el protagonista del documental ganador del Óscar, “The Fog of War” (Rumores de Guerra).
Tampoco se mostró interés periodístico en señalar que McNamara fue presidente del Banco Mundial entre 1968 y 1981.
De igual modo, la prensa ignoró las condolencias del Gobierno de Vietnam por la muerte del ex secretario estadounidense de Defensa, que a pesar de la sangre derramada en su territorio, tuvo el decoro de pedir: “Que descanse en paz”.
La indiferencia ante la muerte de McNamara también quedó reflejada en Facebook y Twitter, en donde millones de personas diariamente siguieron los acontecimientos vinculados a la muerte de Jackson.
Según portavoces de Facebook, unos 800.000 estatus de páginas personales se habían actualizado a los treinta minutos de haber dado comienzo el homenaje de Jackson, es decir, unos 6.000 por minuto.
Michael Jackson murió el 25 de junio y la cobertura periodística continúa hasta el día de hoy, mientras que Robert McNamara falleció el 6 de julio y desde ese día navega en la nave del olvido.

EL PERSONAJE
Un polémico estratega militar
Robert McNamara asumió el cargo de secretario de Defensa estadounidense en 1961. Tuvo un papel importante en la gestación de la fallida invasión de la bahía de los Cochinos, con la que se buscaba derrocar al gobierno de Fidel Castro. Un año más tarde, durante la crisis de los misiles en Cuba, que puso a Estados Unidos y la Unión Soviética al borde del conflicto nuclear, también estuvo entre los asesores más cercanos del presidente Kennedy. Pero su nombre pasará a la historia ligado a la guerra de Vietnam, cuya escalada militar impulsó.

¡En Guardia! Historiadora Afirma que Encontró a D'Artagnan


Una búsqueda de cinco años para localizar la tumba de D'Artagnan —la inspiración para la novela de Alejandro Dumas "Los Tres Mosqueteros"— condujo a una pequeña iglesia holandesa donde una nueva investigación indica que está enterrado el héroe espadachín.



Charles de Batz de Castelmore d'Artagnan murió durante el sitio de Maastricht el 25 de junio de 1673 y, de acuerdo con una destacada historiadora francesa, fue enterrado sólo a unos kilómetros de distancia en la iglesia de San Pedro y San Pablo en Wolder. "El rastro es muy preciso", dijo Odile Bordaz.
La historiadora descartó las teorías de que el cuerpo de D'Artagnan fue llevado de vuelta a Francia, y está presionando a las autoridades holandesas y ala Iglesia Católica para que autoricen una excavación arqueológica en el sitio. "Yo estimaría la posibilidad de éxito en 50/50", dijo.
Dumas escribió "Los Tres Mosqueteros" en 1844 después de leer sobre las hazañas de D'Artagnan en el libro "Les Memoires de Monsieur d'Artagnan", que se había publicado casi 150 años antes. Aunque Dumas adelantó la acción en unos 15 años e inventó gran parte de la trama, los personajes principales están en la historia.
D'Artagnan nació al suroeste de Francia entre 1611 y 1615 y a los 20 años llegó a ser un miembro de los mosqueteros del rey. Atrios, Porthos y Aramis estaban entre sus camaradas. Él participó en operaciones de capa y espada para Luis XIII, y luego para Luis XIV, el Rey Sol, quien lo puso a la cabeza de los mosqueteros en 1658. D'Artagnan fue muerto durante un ataque contra los holandeses encabezado por el duque de Monmouth, quien dirigía un contingente inglés aliado de Francia.
El padre Peter van der Aart, sacerdote de la parroquia de San Pedro y San Pablo, contó a The Times que existía una buena posibilidad de que D'Artagnan estuviera enterrado en la iglesia o cerca de ésta, pero agregó que sólo se autorizaría una excavación si los historiadores pudieran estar seguros del lugar exacto de la tumba.
"No creo que pudiéramos cavar todo el lugar para buscarlo", afirmó el sacerdote.


El Mercurio (Chile), sábado 15 de noviembre de 2008

¿El Héroe Galo se Rindió?

La hija de Albert Uderzo criticó la venta de los derechos del pequeño guerrero. Se teme que baje la calidad del célebre cómic

Astérix todavía porfía con los invasores romanos en los cómics que han vendido millones de copias en todo el mundo. Sin embargo, a Albert Uderzo, el autor del inolvidable guerrero galo, se le acusa de haberse rendido, no a las tropas de Julio César sino a los intereses comerciales. Y quien formula tal acusación no es otra que la propia hija del ilustrador francés, Sylvie.
Uderzo, de 81 años, creó a Astérix en 1959 con la colaboración del guionista René Goscinny, a quien sustituyó en las tareas de escritura cuando murió en 1977 hasta el pasado diciembre, cuando el dibujante vendió sus derechos sobre el personaje. Los nuevos propietarios anunciaron la semana pasada que contaban con autorización para prolongar las aventuras de la pequeña aldea gala después de la muerte de Uderzo.
Sylvie Uderzo, sin embargo, mantiene una opinión contraria. La hija del ilustrador ha declarado que semejante decisión traiciona el espíritu de Astérix, el diminuto guerrero que aplaca las hordas de romanos gracias a la fuerza sobrehumana que le concede la mágica poción elaborada por Panorámix el druida.
"Me rebelo contra los que son quizás los peores enemigos de Astérix, los hombres de finanzas y de la industria", ha escrito Sylvie Uderzo en una columna publicada por "Le Monde" con el título "A los lectores de Astérix". "Es como si las puertas de la aldea gala hubiesen sido derrocadas para dejar vía libre a los ejércitos del Imperio Romano".
Desde su punto de vista, la asediada villa es Ediciones Albert René, que publica los cómics de Astérix y de la que Sylvie controla el 40%. El Imperio Romano, sería el gigante de la publicación Hachette Livre, que es la empresa que ha adquirido el restante 60%. Según Sylvie, el modo en que Hachette ha tomado control de Astérix hace pensar en "una manipulación destinada a cambiar el curso natural de las cosas".
Albert Uderzo, que raramente habla en público, tampoco ha querido pronunciarse en esta ocasión. Tampoco las portavoces de Ediciones Albert René y Hachette Livre (filial del grupo Lagardere) han querido emitir ningún comentario al respecto.
Sylvie Uderzo ha recalcado que su preocupación principal es que las historias de Astérix que se realicen sin la participación de su padre ofrezcan una calidad deplorable. En cualquier caso, también para ella están en juego sus suculentos ingresos, y por ello espera "un giro de 180 grados" en la decisión de su padre. "Pelearé no contra mi padre, sino para preservar su obra, imaginada a cuatro manos con René Goscinny", finalizó Sylvie.
El Comercio, 18 de enero de 2009

Están Locos estos Romanos, Asterix


Por Luis Carranza Torres (*) y Sergio Castelli (**) - Exclusivo para Derecho y Justicia

Los derechos de la historieta guionada por René Goscinny e ilustrada por Albert Uderzo en 1959, respecto de una aldea gala que en el año 50 a.C. se niega a rendirse a los romanos de Julio César, acaudillados por dos simpáticos personajes de bigotitos, un rubio, bajito y flaquito (Asterix) y otro moreno, alto y gordinflón (Obelix), son el centro en nuestros días de una disputa legal de proporciones en Francia.
A los que no han sido, como los autores de esta columna, devotos seguidores de estas historias, tenemos que decirles que se trata no sólo de los personajes de la historieta francesa más popular en el mundo, sino que resultan para los galos de hoy lo que Patoruzú significa para nosotros. Tanto se identifican los franceses con ellos que el primer satélite lanzado por Francia en 1965 se llamó Asterix y el nombre de la mascota de la Copa Mundial de la FIFA de 1998 fue nombrada Footix, en homenaje a los personajes de la tira, cuyos nombres terminan en todos los casos con el sufijo “ix”.
Pero, además de resultar nuestros héroes sólidos referentes culturales de Francia en el mundo, son asimismo un gigante de los derechos de la propiedad intelectual y afines, con más de 325 millones de álbumes de sus historias vendidos, varias películas de cine y no pocos ciclos de dibujos animados para televisión, así como un parque temático de diversiones (Parc Asterix, a 30 km de París), que dejó  los ingresos de EuroDisney como los de una kermés de barrio. Para dar un solo dato de la magnitud económica de la que hablamos, digamos que sólo en productos de merchandising con su imagen o referidos a ellos, en el 2007 los titulares de los derechos facturaron 11 millones de euros.
Poco antes de la Navidad del pasado año, el mundo editorial galo se sorprendía con la noticia más importante en un lustro: el gigantesco grupo multinacional Hachette se hacía con la mayoría accionaria de Éditions Albert-René, la editorial creada por Albert Uderzo y Anne Goscinny, cuando todavía el amor a los negocios en común era mutuo, para proseguir la publicación de las aventuras de Asterix tras la muerte del padre de esta última. Es que Albert había vendido, sin consulta previa a la socia, su 60% dela empresa. A la nada advertida Anne, todavía accionista del 40% restante, se le atragantó el pan dulce navideño, y prometió venganza.
Pero como en los culebrones de la tarde televisiva, una tercera en discordia vino a patear el tablero: la propia hija de Albert, Sylvie Uderzo inició acciones legales para anular dicha venta. Entendía que su padre había sido aprovechado por su edad (82 años), para vender mal y pronto. Y con aires de cruzada cultural, declaró al diario Le Monde que lo suyo era una pelea “contra los peores enemigos que ha tenido Asterix, los ejecutivos y la industria, los invasores romanos de Hachette”.
Su padre le contestó por una entrevista en Le Figaro (adversario periodístico de Le Monde), señalando como culpable de los actos de su hija a su yerno Bernard Boyer de Choisy, a quien se refiere como Iznogoud, en alusión al maquiavélico visir de la historieta humorística francesa creada por su amigo René Goscinny y el dibujante Jean Tabary en 1961 para la revista Record.
Para el 5 de marzo está fijada la primera audiencia de  la pelea judicial, en la que Sylvie deberá demostrar que su padre estaba gagá al firmar, en tanto Albert tratará de probar que su hija tiene menos carácter que un helecho, y no es más que un instrumento de su ambicioso yerno.
Habrá más noticias para este culebrón de la propiedad intelectual. No lo duden, estimados lectores.
(*) Abogado. Doctor en Ciencias Jurídicas.
(**) Agente de la Propiedad Industrial.
Estudio Castelli & Asociados

La Izquierda Legal


La izquierda legal que optó por participar en los espacios democráticos no hizo en su momento el deslinde necesario con la violencia terrorista. Y ahora es tarde

Por: Abelardo Sánchez León

La izquierda legal en el Perú tiene una deuda: no ha hecho un deslinde tajante con el terror que desataran Sendero Luminoso (SL) y el MRTA. Esa omisión permitió una fácil manipulación y que a la distancia se la coloque en un mismo saco. La ecuación resulta cómoda: ser de izquierda es ser terrorista.
La izquierda se divide en los años 60 en la línea moscovita y en la pekinesa. La línea china, maoísta, la denominada no revisionista, se va desgranando en Bandera Roja, en Patria Roja y, al final, en SL. Esa fracción es la que inicia la lucha armada en 1980. Debemos recordar que en los años sesenta también se formó la llamada Nueva Izquierda; incluso en EE.UU., donde militaron intelectuales de las características de Norman Mailer. Ver sus crónicas recogidas en “América”.
¿Qué pasó con la izquierda legal? ¿Prefirió el debate parlamentario de las ideas? ¿Si supuestamente creía en la toma del poder por las armas, por qué no lo hizo? Quizá no lo consideró conveniente. O no tuvo coraje. Ser marxista, recordémoslo, no es sinónimo de tomar necesariamente las armas. En el hipotético caso de haberlas tomado, quizá lo hubiese hecho con una metodología diferente a la senderista. No lo sabemos. Estamos especulando. Un marxista, además, puede ser un académico como Marshall Berman o José Aricó.
Debemos enfatizar que durante la década del 80 hubo en el Perú una izquierda legal, encabezada por Alfonso Barrantes Lingán, alcalde de Lima, compañero en las lides políticas de Alfonso Grados Bertorini y de Luis Bedoya Reyes y que tuvo una cierta amistad con Alan García Pérez. No olvidemos, tampoco, que muchas de las víctimas del terror de Sendero Luminoso fueron dirigentes de esa izquierda. Forzando una imagen, podemos afirmar que los dirigentes barriales enfrentaron sin armas a los senderistas y protegieron con sus muertes a las clases medias.
La izquierda legal, sin embargo, que optó por participar en los espacios democráticos, especialmente como congresistas, no hizo en su momento el deslinde necesario con la violencia terrorista. Y ahora es tarde. Como lo reconoce, además, en una entrevista Alberto Adrianzén, ya no existe esa izquierda como tal. Esa omisión, a pesar de su reconocida actuación pública, da pie a que se la entienda, sesgadamente, como un antecedente directo del proyecto de Sendero, que la idea de un museo de la memoria sea manoseada y se dificulte aun más una verdadera reconciliación.
Diario El Comercio, 11 de marzo de 2009

Ledesma: "Recordó mi Onomástico en Plena Lucha"


“Hicimos amistad en la Asamblea Constituyente. El 19 de setiembre de 1978 llegué a la Comisión Principal y la lucha política era por entonces tan intensa que me había olvidado de mi cumpleaños. En eso se me acerca Bedoya Reyes y me saluda por mi onomástico. Y me dice: “Aquí no hay lugar para brindar con un buen vino, pero vamos a tomarnos un café”. Me llevó a una mesita, donde ya tenía las tazas y el termo de agua caliente. También se sentó Ernesto Alayza Grundy. Así, entre los tres, no obstante nuestras diferencias ideológicas, celebramos mi cumpleaños número 46 y quedamos como amigos. Eso sí, demoré 15 años en entender la importancia de la economía de mercado que obliga a un país a ser eficiente para competir con otras naciones. Bedoya defendió este precepto durante los acalorados debates de la Asamblea Constituyente”.


Diario El Comercio, 8 de marzo de 2009

En Memoria del Viejo Coronel



A propósito de la inauguración del monumento a Francisco Bolognesi, El Comercio lanzó una edición especial 25 años después de la Batalla de Arica

Por Francisco Sanz Gutiérrez



Como cada 7 de junio, el Ejército homenajea hoy a su patrono Francisco Bolognesi y sus tropas, junto con autoridades civiles y militares, se reunirán en la plaza que lleva su nombre para renovar su juramento de fidelidad a la bandera. Como cada inicio de junio, en los colegios se habrá repetido cientos de veces la respuesta a los chilenos que dejó para la posteridad. Como cada 7 de junio, hoy se recuerda al viejo coronel que sucumbió aquel día de 1880 en la Batalla de Arica.
Cuando ocurrió el combate, El Comercio llevaba cuatro meses clausurado por la dictadura de Piérola y recién fue voceado de nuevo por las calles de Lima en octubre de 1883, "cuando ya no había en la capital ningún invasor ocupante", según la edición especial del centenario de fundación del Diario.
El gran reconocimiento a Bolognesi tuvo que esperar 25 años después de su muerte, cuando Lima se vistió de fiesta para la inauguración del monumento a nuestro héroe de la Guerra del Pacífico. La edición de 16 páginas del 5 de noviembre de 1905 se dedicó íntegramente al magno suceso --en los días previos se daba cuenta de "que en los últimos días han llegado a la capital, en los vapores de la carrera y en los trenes del interior, más de 5 mil personas"-- y a la remembranza de la figura de Bolognesi:
"Ha transcurrido un cuarto de siglo desde la gloriosa resistencia de Arica, y esa acción, tan hermosa entre las desventuras y sacrificios del Perú en la infortunada Guerra del Pacífico, va a ser inmortalizada en el simbólico monumento que la gratitud nacional levante en Lima al noble anciano y a sus valientes compañeros, inmolados con él, por la patria, sobre la cumbre del célebre Morro (...) Si no tuvimos en Arica los resplandores del triunfo, conquistamos los lauros de la gloria".
Poco antes de su lamentable deceso en el 2004, el historiador Percy Cayo resaltó --a propósito de la colección Héroes y Personajes publicada por esta casa editora-- la importancia de desmitificar a los héroes y presentar una visión más humana y menos estereotipada de ellos. "Sin postergar el hecho histórico, hay que situar al héroe como humano", advirtió Cayo.
Es ello justamente lo que encontramos en la extraordinaria semblanza que de Bolognesi trazara Roque Sáenz Peña, el argentino que llegó en silencio al Perú a ofrecer sus servicios, que fue uno de los pocos sobrevivientes de Arica y que se convirtió en el invitado estelar de aquellos fastos de noviembre de 1905. El Comercio reprodujo aquel revelador testimonio de primera mano en la mencionada edición:
"El noble anciano contaba 64 años. Sus antepasados eran de origen italiano, pero el coronel don Francisco Bolognesi había nacido en el Perú, sirviendo a su patria en el ejército de línea, desde que sentó plaza con el grado de subteniente.
El coronel Bolognesi era un hombre de pequeña estatura, había lentitud y dureza en sus movimientos, como lo había en su fisonomía: la voz era clara y entera, los años y los pesares habían plateado sus cabellos y su barba redonda y abundante destacaba la tez bronceada de su rostro enérgico y viril.
Su inteligencia era inculta, pero tenía la percepción clara de las cosas; la experiencia de los años y la malicia que se desenvuelve en la vida inquieta de los campamentos habían dado a su espíritu cierta agilidad de concepción (...)"
Tamaña cercanía con el sexagenario coronel le dio a Sáenz Peña la posibilidad de comprobar lo inexpugnable de su carácter y lo férreo de su disciplina:
"Nunca pudimos conocer sus opiniones sobre la campaña. Asistió a todos los combates como jefe de la segunda división del ejército del sur, pero jamás opinó sobre el acierto de las operaciones, había tomado las armas para batirse y no para juzgar a sus superiores, decía: la ordenanza prohíbe la murmuración de los subalternos y él era soldado sobre todas las cosas".
Pero indudablemente los picos emotivos se alcanzan en las descripciones del fragor de las luchas contra los chilenos:
"La batalla de Tarapacá le sorprendió gravemente enfermo (...) Pero siente los primeros tiros del combate, y el viejo veterano se incorpora en el lecho (...) Asume el mando de su regimiento y soporta nueve horas de combate, con el rostro encendido del febriciente, la mirada brillante por el ardor de la pelea y el corazón contento de haberse batido por la Patria.
¡Qué sinceridad de sentimiento había en ese viejecito batallador!
'Las balas chilenas, nos dijo señalando el pie derecho, apenas llegan a las suelas de mis botas'... un proyectil le había llevado un tacón de sus granaderas".
Hasta que llegó el combate de Arica, donde Bolognesi y sus 1.600 hombres se vieron cercados por más de 5.000 enemigos. Y ahí estuvo Sáenz Peña, desde la histórica respuesta al emisario chileno Juan de la Cruz Salvo hasta el balazo mortal:
"Fue entonces que el coronel Bolognesi se dirigió al parlamentario con una frase cuyo recuerdo lo conservan los pocos peruanos que sobrevivieron al desastre: 'Podéis decir al general Baquedano que me siento orgulloso de mis jefes y dispuesto a quemar el último cartucho en la defensa de la plaza'.
(...) Allí cayó el coronel Bolognesi, inclina su frente y cae con el alma serena, una bala le había atravesado el corazón (...) Aún conservo la impresión que me produjo la disposición del cadáver; se le había despojado de la chaquetilla y de las botas y un feroz culatazo le había descubierto la parte superior del cráneo. Aquella impresión fue para mí tan intensa, tan honda y dolorosa como la muerte misma de mi viejo amigo, el querido y venerable anciano".
El homenaje a Bolognesi de principios del siglo XX fue la primera gran cobertura en la andadura del decano, tal como apunta el historiador Héctor López Martínez: "Nunca antes El Comercio desplegó tanto personal de redactores, fotógrafos y dibujantes para ofrecer a sus suscriptores una información completísima, y desde variados ángulos, de un suceso".
En sucesivas ediciones previas a la inauguración del monumento en la plaza Bolognesi, este Diario informó de los avances en la recolección de fondos, en la construcción y en la iluminación del lugar.
Para completar la faena, se adelantó a la llegada de Sáenz Peña al Callao y, a través de un corresponsal especial enviado hasta Valparaíso, acompañó al visitante argentino en la travesía a bordo de los vapores Guatemala e Iquitos.
Bajo el epígrafe Apuntes de Viaje, el corresponsal recogió sus impresiones y escribió así desde Pisagua tras el primer encuentro: "Aunque, como lo comprenderán los lectores de El Comercio, habría deseado yo hacerle preguntas relacionadas con su actuación en la guerra contra Chile, creí prudente abstenerme de entrar en un camino que habría sido embarazoso para nuestro ilustre huésped".
Cuando la embarcación llegó a Arica, ya la memoria se había lanzado a hablar: "El general Sáenz Peña se hallaba en esos momentos rodeado de su familia y de nosotros, explicándonos cómo fue aquella hecatombe. En su voz, en sus ademanes nerviosos y en su fisonomía pálida se reflejaba la emoción de que era presa. Resurgía para él todo un pasado, con sus tintes de muerte y sus destellos de gloria, en el cual figuró como uno de sus principales actores".



Diario El Comercio, 7 de junio de 2008

Familia Herrera Vigil


Familia Herrera Vigil, mayo de 1937







Raúl Alfonso Herrera Vigil hacia 1947



Hermano Jorge Antonio y Luis Enrique Herrera Vigil hacia 1953



Matrimonio Adrián del Carpio Herrera y Sara Herrera Vigil
Los Puros, 24 de febrero de 1957
con Raúl Herrera Espinoza y Victoria Vigil Melgar de Herrera




Agenor Demetrio Herrera Vigil hacia 1958


Jesús Isaac Valdez Díaz, hacia 1963

Buscan Conservar el Arbol de la Quina

Está casi en extinción. Quinina que posee este árbol salvó a miles de vidas en todo el mundo
Ante la depredación que por más de 300 años sufrió el árbol de la quina, en los últimos meses varios proyectos que impulsan el repoblamiento y el desarrollo sostenible de esta especie son evaluados en el Instituto Nacional de Recursos Naturales.
Ello ocurre en virtud del Decreto Supremo 043-2006-AG, por el que se permite la extracción, colecta, tenencia, transporte y exportación de especies categorizadas, entre ellas la “Cinchona calisaya” (quina), siempre que procedan de planes de manejo aprobados por el Inrena. Se informó que gran parte de las propuestas fue presentada por centros de investigación y universidades. La divulgación dependerá de la aprobación del Inrena.



El árbol de la quina, por la quinina y otros alcaloides fenólicos que posee, es una de las especies de mayor importancia medicinal para orgullo del Perú, pues fue el remedio más eficaz contra la malaria o paludismo y otras infecciones por más de 300 años, al punto que su uso salvó miles de vidas en el Perú y en todas las zonas tropicales del mundo. Era tan valioso que desde 1825, quedó simbolizado como uno de los íconos de nuestro escudo nacional.
Guillermo Ramos, biólogo del Inrena, reveló que la depredación de muchas décadas puso la “Cinchona” (que pertenece a la familia de las rubiáceas y comprende 23 especies de las cuales 17 se encuentran en Perú) casi en extinción. “La depredación fue gigantesca y había tráfico de esta especie. Hoy solo es posible encontrar algunos ejemplares muy dispersos en Amazonas, Huánuco y San Martín, entre otros”, señaló.
Por su parte, la bióloga Isela Arce, tras precisar que el árbol tuvo como hábitat Amazonas, Cajamarca, San Martín, Huánuco, Madre de Dios, entre otros departamentos, subrayó que ante el peligro de su desaparición, por Resolución Ministerial 0258-99-AG, está prohibida la extracción del árbol de la quina en los bosques naturales.


El Comercio, viernes 30 de enero del 2009

La Muerte de Bobby Kennedy

Publicación. Libro especula sobre implicados
El periodista de la BBC shane o'sullivan pide a través de su libro "Who Killed Bobby" que se reabra juicio a Sirhan Sirhan. Las especulaciones sobre la autoría del crimen llevaron a barajar la posibilidad de que incluso la cia estuviera implicada.


Nueva York [EFE]. Cuando se cumplen cuarenta años del asesinato de Robert F. Kennedy, las circunstancias en que se produjo su muerte siguen suscitando nuevas dudas, como deja patente un libro del periodista de la BBC Shane O'Sullivan.
Al igual que en el caso de su hermano, el presidente John F. Kennedy, el asesinato de Robert, cuya muerte se recordó ayer, generó todo tipo de especulaciones sobre la autoría del crimen que llevaron a barajar la posibilidad de que incluso la CIA estuviera implicada.
Pese a que la investigación oficial sobre los pormenores de lo ocurrido en el hotel Ambassador de Los Ángeles la noche del 5 de junio de 1968 se cerró un año más tarde con el encarcelamiento del joven palestino Sirhan Bishara Sirhan, son muchos los investigadores que han seguido recabando datos, entre ellos el periodista Shane O'Sullivan.
El irlandés quiere que la sociedad estadounidense recuerde uno de los crímenes que cambiaron el rumbo del país, por lo que desde hoy está a la venta su libro "Who Killed Bobby?" ("¿Quién mató a Bobby?").



"No quiero que parezca que aprovecho el aniversario cuarenta de su muerte para ahondar en el dolor de la familia Kennedy, sino que no se olvide que aún hay preguntas sin responder en este caso", explicó el periodista, quien ha dedicado cuatros años de investigación a la elaboración del documental y el libro. RFK murió en la madrugada del 6 de junio tras ser sometido a una operación de urgencia que duró cerca de cuatro horas, mientras que Sirhan, el único acusado, fue condenado a cadena perpetua en 1972 y aún sigue recluido.
Son muchas las preguntas que el periodista deja en el aire, como la posibilidad de que hubiera un segundo pistolero involucrado, ya que, según explica, en la pistola de Sirhan solo cabían ocho balas, mientras que las últimas pruebas de sonido de las grabaciones existentes revelan que hubo al menos diez disparos.
El periodista ha entrevistado a varios testigos clave en el caso y detalla cómo la policía los intimidó para que cambiaran sus testimonios y no hablaran de la misteriosa chica que fue vista en el hotel gritando "¡Le disparamos!".
O'Sullivan reconoce que el acusado jamás ha involucrado a terceros en el asesinato de RFK, pero recuerda que no es capaz de recordar ni una sola escena de aquella noche y muestra pruebas psiquiátricas que indicarían que Sirhan pudo haber sido programado para asesinar al político demócrata.
O'Sullivan asegura que el caso por el asesinato de RFK debería reabrirse para llegar al fondo de "las muchas cuestiones que quedaron sin resolver" y para que Sirhan tenga el juicio justo que jamás tuvo.


El Comercio, sábado 7 de junio del 2008